70 años de la publicación de los primeros libros de Antonio Fernández Molina







En 2023 se cumplen setenta años de la publicación de los dos primeros libros de Antonio Fernández Molina. Nos referimos a los poemarios Biografía de Roberto G. y Una carta de barro.
En marzo de 1953 apareció Biografía de Roberto G., en la Colección Neblí de Madrid, al cuidado de Rafael Millán, Felipe García Ibáñez y Juan-Germán Schroder, con dibujos de Núñez Castelo.

El libro comienza con este poema:


Biografía de Roberto G.


1

Entre la luz y la sombra están los pájaros
en una selva que puede ser jardín,
o mar, o huerto;
en una selva donde corren caballitos,
diminutos trenes de selva
y hojas sin raíces arrastrándose.
Pero el joven volando con sus años
va, de luz a sombra,
de sombra a luz, sin detenerse.
Mira una estatua
después un torso, una cintura,
oye una música que compara a un suspiro,
detiene un gallo cantando a la aurora,
rompe tinajas y acaricia senos.


En Madrid, también en 1953, se edita Una carta de barro, tercer libro de la colección de la revista El pájaro de paja, al cuidado de Ángel Crespo.
En la cubierta se incluye una viñeta de María Luisa Madrilley y en el interior un dibujo de Gregorio Prieto.
El libro se abre con el siguiente poema que, por cierto, es pieza siempre presente en las antologías del autor:



Una carta de barro

Os envío un mensaje de barro, amigos míos.
Un mensaje de barro, sí: me aburro,
me estoy doliendo de esta vida tonta,
y de tantas miserias de esta vida.
Una espina me punza en el costado
y suelo despertarme a media noche,
me acuerdo de mi padre ya difunto
y a dormir otra vez si lo permiten.
Lentamente me mato paso a paso;
a pesar del tabaco no me olvido
lo que olvidar podría con vosotros.
La familia no esconde los problemas.
El barro por las calles me embadurna,
embadurna mis únicos zapatos
y las manos si quiero coger piedras.
Me molesta el bigote
del guarda forestal de este distrito.
Reparto mis limosnas con paciencia
a riesgo de dar quiebra en mi bolsillo
y si llueve me mojo, sí: me mojo
y mi espalda acribillan pulgas siempre.
El vino de esta tierra tiene ácido;
mis pantalones, sucios, barro llevan;
hasta el barro se pega a los melones.
Nadie limpia de barro las ovejas.
Me aburro de este barro y de este trigo.
Un árbol tiene el pueblo que no hay otro
más hermoso que este árbol a seis leguas.
Tengo noches azules, soles fuertes,
recuerdos duros entre cabras mochas.
Barro en la cincha de la albarda vieja.
Estoy vejado de este barro tonto
y de tanto tocino como como
se me viene la grasa hasta la boca.
«Éste lo hizo Demetrio» en el cemento, escriben,
y Demetrio se ha muerto hace unos años.
A veces grito, pero sale sordo.
Si me tiendo de espaldas mato hormigas.
Soy más hombre que nunca, amigo míos.


En el 2003, para conmemorar el cincuenta aniversario de la publicación de los primeros títulos del autor, Libros del Innombrable publicó un tomo con una selección de cuentos y relatos: La vida caprichosa. El libro se presentó en una gira que llevó a Antonio Fernández Molina, con la poeta y profesora Alicia Silvestre y el escritor y editor Raúl Herrero, por Huesca, Zaragoza, Barcelona, Valencia, Murcia, Granada y Madrid. En esta última ciudad se realizó un acto en el Museo Reina Sofía en homenaje a Fernández Molina. Para la ocasión intervinieron Luis Alberto de Cuenca y Fernando Arrabal. Además del libro de Molina, durante el periplo se presentaron también el poemario El faro de Sigfrido, de Silvestre y Herrero, y Gestas y opiniones del doctor Faustroll, de Alfred Jarry.

Los poemas se han tomado de las versiones de Poesía Completa I (Libros del Innombrable, Zaragoza:1999) ya que fueron revisados por el autor y dados como versiones definitivas. Si bien, apenas existen diferencias con la edición primera.


Si desea más información sobre Poesías Completas I:

Si desea más información sobre La vida caprichosa:


Si desea más información sobre Antonio Fernández Molina:


Comentarios

  1. Librería Balqís
    Los libros son una fuente inagotable de conocimiento y entretenimiento. A través de ellos podemos viajar a lugares lejanos, conocer nuevas culturas, aprender habilidades y descubrir historias fascinantes. Además, leer es una actividad que nos ayuda a desarrollar nuestra imaginación, mejorar nuestra capacidad de concentración y ampliar nuestro vocabulario. Por eso, siempre es recomendable tener un buen libro a mano.

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